Por: Julián Puig Hernández.
Desde que comenzó la cosecha, en el mes de mayo, y hasta la fecha, laembarcación del establecimiento pesquero Juanito Mora encargada de esa labor, con sus diez pescadores directos a la producción, ha colectado cerca de ochenta y cuatro toneladas de cojinúa, cifra que constituye una satisfacción por cuanto supera los pronósticos de la corrida.
Sólo en los primeros dieciocho días de agosto, se habían pesado más de treinta y cinco toneladas y media, no sólo con el concurso de los obreros de la entidad, sino también con la entrega, discreta pero plausible, de los pescadores particulares.
Este tipo de captura se realiza con la técnica de tranques; es decir, con artes fijas sembradas en Covarrubias y La Herradura, en el litoral norte de los municipios de Puerto Padre y de Jesús Menéndez.
El destino de la producción se ubica en el mostrador del propio establecimiento, con precios diferenciados, así como en centros comerciales y mediante gestiones de venta en el terreno, en sitios alejados de la ciudad cabecera del municipio.
También la cojinúa aparece en importantes cantidades en centros asistenciales de salud, en la gastronomía popular y en instituciones que tienen contratos con el establecimiento.
Los volúmenes, pronosticados en ochenta toneladas para fines de agosto, serán superados con creces porque los corrales permanecen agitados constantemente con la presencia del carnoso pescado.
El estímulo monetario para los pescadores es importante porque el veinte por ciento de su trabajo le es remunerado en divisa, y el resto, ochenta, lo reciben en moneda nacional.
Para abaratar los costos y ganar en prontitud, se habilitó el transporte terrestre, encargado de traer la captura bien refrigerada hasta el establecimiento, donde recibe el debido procesamiento.
