Un caballero de la poesía
La vida está llena de poesía y si no la vemos es porque nos urge esa voluntad; pero sin dudas existe. Sentirla, acariciarla hasta la plenitud, es virtud de los elegidos y Martín Renael González Batista (MRGB) es uno de ellos.
Su locuacidad en apariencia es simple, pero es de naturaleza reflexiva. Parece que todos los días tiene por oficio desandar sus propias cavilaciones y si uno pretende sacar de él algo nuevo, se me ocurre, es prudente preguntar con ciertas maneras erráticas.
(P) Noto cierto paralelo entre tu niñez, tus raíces y la décima ¿son sólo imaginaciones?
(RGB) No es necesario nacer en el campo para escribir décimas o improvisarlas. Ella nació en España y son sus más renombrados cultores, poetas del Siglo de Oro español: Góngora, Quevedo, Lope de Vega, Vicente Espinel y Juan de Mal Lara, entre otros. Nací en zona rural de Holguín y puedo poblar mis versos con su policromática flora y fauna; aprendí a bañarme en el río con jigües y ciguapas y escuché en las palabras de los abuelos el misterioso ruido de las brujas nocturnas volando sobre las casas y los palmares. Sin embargo, una de las provincias cubanas que más repentistas y poetas de la décima tiene, nacidos y criados en ella, es La Habana. Y ya ves, sus raíces son de cemento y asfalto.
(P) Cuando analizamos los esfuerzos personales que haces, los que todavía no se te han reconocido del todo, para universalizar la décima ¿existe algún compromiso supremo, con un yo mucho más profundo, aún sin develar?
(MRGB) La décima se universalizó en el mundo hispanohablante por sí misma, a través de los siglos. Su nacimiento, a partir de la copla real, tuvo numerosas variantes, pero siempre octosílabas. Con la conquista del Nuevo Mundo por los españoles, se estableció con mayor o menor fuerza en la mayoría de los territorios latinoamericanos, incluso, hasta el sur de los Estados Unidos tuvo cultores. Actualmente, pueden encontrarse cientos de repentistas y decimistas escritores en La Florida y otros Estados norteamericanos. Existe en idioma francés y portugués. Rosalía de Castro nos dejó algunas en lengua gallega. En México, Argentina, Puerto Rico, República Dominicana y Perú, está viva y vigorosa. En España se escribe menos, aunque hay grupos notables en Islas Canarias, algunas zonas de Andalucía: Conozco poetas de reconocido prestigio que la incluyen en su obra en otras regiones de la península. Podría mencionar a José López Rueda, Tino Barriuso, Carlos Benítez Villodres… He publicado libros de cuentos para adultos y niños, verso libre, sonetos, investigaciones, artes plásticas, una novela…No tengo compromisos con ningún género literario, cada uno es una incitación y una aventura.
(P) Hay personas que con mucha razón igualan la décima a la música, especialmente campesina. Aunque no te hemos visto literalmente cantarla ¿en algún momento lo haces o has sentido necesidad de hacerlo?
(MRGB) La música y la décima tienen, cada una, su modo propio de manifestarse. Pueden unirse debido a que la rima y la medida se prestan a la musicalización. Muchas décimas hay no sólo en Cuba, que no se valen de nuestra música tradicional campesina. Tengo grabaciones de poetas y compositores chilenos y mexicanos en las que se combinan las décimas con géneros musicales de sus países. No soy repentista ni he sentido esa necesidad o afición, menos en un país como el nuestro, donde la tierra pare tantos y tan excelentes improvisadores.
(P) Eres una de las personalidades más importantes de la décima en Cuba ¿cómo logras que esto no afecte tu naturaleza humilde?
(MRGB) Puedo asegurarte que no soy humilde. El diccionario define esa palabra como “dócil, falto de orgullo, fácil de humillar”, y eso no concuerda conmigo. Sería injusto si no te dijera que he recibido muchos reconocimientos en Cuba y fuera de ella, por mi obra literaria. Lo que pasa es que no soy autosuficiente en el sentido de la presunción, “no me creo cosas”, como popularmente se dice.
(P) En estos tiempos de modernidad vemos muchos niños y jóvenes de la ciudad cultivar la décima, no sólo escribiéndola sino también cantándola. ¿Cómo avizoras esta forma estrófica?
(MRGB) Como te señalé arriba, la décima no nació en el campo cubano, ni siquiera en Cuba. Vino de España y aquí, según dijera Jesús Orta Ruíz, “se aplatanó” y creció como la hierba –pero con flores- en los campos y pueblos del país. Grandes hombres de las letras cubanas escribieron –y escriben- décimas, entre ellos José Martí.
Que muchos niños y jóvenes de la ciudad también escriban y canten décimas, garantiza la continuidad de una expresión poética y musical de gran arraigo, que, se ha dicho, es la Estrofa Nacional en Cuba.