Por: Elizabeth Silva Rodríguez.
¿Qué es el arte, sino el modo más corto de llegar al triunfo de la verdad, y de ponerla a la vez, de manera que perdure y centellee en las mentes, y en los corazones? Estas certeras palabras del Apóstol se materializan en dos artistas, María de las Nieves y Leonel Pérez, ellos forman el dúo AD LÍBITUM; con poesías y canciones luchan por el regreso de René, Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio.
Son miembros de la Red en Solidaridad con los Cinco que recorren el mundo para dar a conocer la verdad de nuestros hermanos.
El joven puertopadrense, Leonel Pérez, nos comenta que ellos no hacen nada extraordinario, sino desde su humilde trinchera de artistas, luchan por la verdad, la justicia, por lograr el regreso de nuestros hermanos presos de forma ilegal en cárceles de Estados Unidos. Ellos no son cinco espías, son cinco amigos de la humanidad, cinco que necesitan nuestra solidaridad.
Cada concierto de estos jóvenes, activistas incansables por la liberación de los cinco, son fuente inagotable de conocimientos acerca de hombres honestos, luchadores por la paz y el amor.
Países como Alemania, supieron de la infamia que se comete contra nuestros hermanos presos en las mazmorras del imperio a través de sus poesías y su música. El idioma no constituyó una barrera, la solidaridad se encargó de derribarla, amigos fraternos, amantes de la verdad y ávidos de conocer el caso para incorporarse a la lucha, estaban junto a estos dos artistas, que a su lado, emprendieron el camino.
Leonel nos refirió que al terminar los conciertos en Alemania, muchas personas se les acercaban y preguntaban: Qué puedo hacer para ayudar a los Cinco, cómo puedo integrarme a la lucha.
Ahí se puso de manifiesto el activismo del Dúo Ad Líbitum en esta hermosa tarea.
Comentaba además, este joven puertopadrense, orgullo nuestro, que los conciertos más emocionantes en sus once años de carrera, fueron hechos para un público que no habla español, no obstante, el amor y la razón primó.
José Martí nos legó, que el arte exige en todas sus obras unidad de tiempo, y en aras de lograr esa coherencia transita el Dúo Ad Líbitum, dos jóvenes que luchan por la liberación de nuestros hermanos prisioneros políticos del imperio, y unidos en la vida, hacen del arte una poderosa arma de lucha para lograr el regreso de los cinco antiterroristas presos en las entrañas del monstruo, para materializar así las concepciones martianas de que el arte aviva, agranda, estimula y ennoblece; su tarea es también de una gran nobleza.
María de las Nieves con la dulzura en sus ojos y la voz nos refiere como surgió la idea de los conciertos:
En el dos mil tres y desde entonces, trabajamos la poesía y la música; Leonel musicaliza poemas de Tony, Gerardo y Fernando, lo que resta ahora, desde que finalizó la gira, es no descansar y estaremos dondequiera que seamos útiles, dentro y fuera del país, seguiremos insistiendo por el regreso de los hermanos, redoblaremos los esfuerzos, llevaremos la información sobre esta causa, cada vez que sea necesario, al llevar el arte como triunfo de la verdad.
De José Martí aprendimos que el arte es trabajo, y en esa dirección está el Dúo AD LÍBITUM, en una ardua labor por la liberación de los Cinco, sin derecho al descanso mientras ellos estén en prisión, y como nos indicó el Maestro, el arte consiste en ajustar la forma al pensamiento, y aquella belleza gloriosa y trascendental que sólo da a las obras humanas la justicia; así la poesía, el amor, la verdad y la equidad, van de la mano, en dos jóvenes que se aman y tienen la certeza que la razón triunfará.
